Correr supone todo un desafío para nuestros músculos, articulaciones y cerebro, los cuales tienen que trabajar duro para poder afrontar el reto que supone cada entrenamiento. Cuando terminamos, nuestro cuerpo inicia una fase de recuperación en la que tiene que compensar todo el esfuerzo realizado y toda la tensión acumulada. Sin embargo, no todos los runners prestan toda la atención que se merece, aumentando así el riesgo de lesión. Hoy en Deportes Moya repasamos los errores más comunes que no deberías cometer después de correr ya que pueden estropear tu entrenamiento. ¡Toma nota!

1: Parar de golpe

Uno de los errores más comunes es parar de golpe y saltarse los estiramientos. Lo recomendable siempre es ir reduciendo la intensidad de la carrera durante los últimos 5 minutos para ir disminuyendo así el ritmo cardíaco también. Tu cuerpo necesita volver a la calma poco a poco ya que esa es la forma que tiene nuestro organismo de empezar la fase de recuperación. Una vez haya bajado tu ritmo cardíaco, realiza estiramientos y relaja los músculos para prevenir las lesiones.

2: Hidratarte poco

La hidratación es fundamental antes, durante y después del entrenamiento, pero es después de correr cuando nuestro cuerpo más necesita eliminar adecuadamente los residuos metabólicos. Es fundamental hidratarse bien durante las dos horas posteriores para darle a nuestros músculos el oxígeno que necesitan y los nutrientes para mantenerse flexibles.

3: No reponer las reservas de glucógeno

Cuando corremos utilizamos una gran cantidad de energía, quemamos calorías y consumimos recursos de nuestro cuerpo. Para poder reponer todo eso y favorecer el desarrollo de masa muscular, es importante ingerir macronutrientes como carbohidratos, proteínas y grasas, así como también vitaminas y minerales. Durante las primeras horas después de finalizar el entrenamiento es cuando nuestro cuerpo está más receptivo.

4: Atiborrarte a comida

Sí, hay que recuperar fuerzas, pero no hay que comerse todo lo que encontremos por los armarios. Los dulces, la bollería industrial, las patatas fritas, la cerveza… supone ingerir muchas más calorías de las que has quemado. No solo aportan calorías vacías, sino que también retrasan el proceso de recuperación.

5: Descansar poco

El descanso es fundamental para rendir a tope durante los entrenamientos, de hecho es mucho más importante de lo que parece. Nuestro cuerpo necesita compensar el trabajo que se realiza con el running, así que necesitas dormir cerca de 8 horas para que los músculos, los huesos y los tendones se recuperen del esfuerzo realizado. Sino descansas bien, aumentará el riesgo de lesión.

Esperamos que estos consejos te ayuden a recuperarte al 100% después de cada carrera y puedas rendir al máximo nivel al día siguiente.

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