Cómo respirar bien cuando corremos con frío

El frío es uno de nuestros grandes enemigos cuando queremos salir a practicar deporte en invierno, sobre todo si hablamos de running o trail running. Las bajas temperaturas tienen un impacto en nuestro cuerpo y también en nuestro rendimiento, por lo que es fundamental protegernos bien de él para que nuestro rendimiento se vea afectado lo menos posible. De igual forma, llevar una equipación deportiva adecuada contra el frío es crucial para evitar los temidos resfriados. Hoy en el blog de Deportes Moya queremos hacer especial hincapié en cómo respirar bien cuando corremos con frío. ¡No te pierdas el post de hoy, te ayudará!

Cuando nos iniciamos en el mundo del running es cuando realmente nos damos cuenta de que no sabemos respirar cuando hacemos deporte y de que tenemos que aprender las técnicas básicas de respiración para poder mejorar nuestra capacidad pulmonar y, en consecuencia, nuestro rendimiento. En este blog ya os hablamos de cómo respirar correctamente al correr, así que si todavía no has leído ese artículo, te recomendamos que lo hagas antes de seguir leyendo.

Es cierto que se debe respirar igual en verano que en invierno. Nuestra respiración debe ser desde el diafragma y con la nariz y la boca, aunque debemos darle prioridad a la boca. Sin embargo, cuando el termómetro parece no tener piedad con nosotros es cuando debemos seguir, además, estos trucos para evitar fatigarnos y resfriarnos.

Consejos generales

1. Utiliza una braga para el cuello, un cuello polar o un cuello doble.

Es importante que protejas tu nariz y tu boca ya que el aire frío que respiramos tiende a irritar los bronquios, pulmones y membranas mucosas. Si utilizas este tipo de accesorio estarás consiguiendo que el aire entre más caliente en tu cuerpo y así evitarás la posible tos posterior, bronquitis, resfriados, asma, etc.

Recuerda también que el resto de tu equipación deportiva ha de ser adecuada, así que no olvides el material térmico, aislante y anti viento.

2. Trata de respirar con la nariz y espirar por la boca

Si respiramos con la nariz el aire frío tendrá que recorrer una gran distancia hasta llegar a los pulmones, por lo que llegará más caliente. Durante todo este proceso, el aire también se filtra y se suaviza. No obstante, es cierto que si respiramos por la boca conseguimos enviar más aire a nuestros pulmones. Por lo tanto, los entrenamientos durante días de mucho frío han de ser menos intensos porque si respiramos por la nariz nuestra capacidad pulmonar será menor.

3. Reduce la intensidad de tu entrenamiento

Del punto anterior se deriva este. Evita las altas intensidades y los cambios de intensidad cuando hace mucho frío ya que ese aumento del esfuerzo puede acabar por irritar las vías respiratorias. ¿Lo más recomendable? Hacer carreras largas y fáciles.

¡Y qué el frío no pueda contigo! Recuerda que en nuestra web Deportes Moya puedes encontrar zapatillas de running para hombre y para mujer, así como también toda la equipación deportiva necesaria. Te esperamos 🙂

Fuente de la imagen principal: Facebook Brooks Running

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