El mercado de los patines es de lo más diverso, pudiendo encontrar diferentes opciones según el estilo de patinaje que queramos hacer. De esta forma:
- Patines para fitness, los más básicos. Los más adecuados para uso recreativo, para mantenerte en forma y para hacer rutas suaves. Tienen la caña rígida para que los tobillos no sufran y la bota, que es de tela, es más flexible, ya que no necesitan tanta protección. Se atan con cordones y cintas de velcro en la zona del empeine y del tobillo. Su chasis largo permite rodar por más tiempo y mantenerte en línea recta, lo cual te hace ganar mucho en comodidad, incluso en terrenos irregulares. El grosor de sus ruedas suele rondar entre los 80 y los 84 mm.
- Patines freeskate, son los más versátiles y polivalentes, ya que sirven para hacer slalom, para derrapar, bajar por escaleras, girar sobre conos, hacer trucos… Este tipo de patines en línea no lleva frenos de taco. Su caña es alta y la bota está fabricada con mezcla de fibra de vidrio o plástico para que sea rígida. Cuenta con cierres micrométricos en la zona del empeine para que el pie vaya lo más sujeto posible ante los frenazos y las vueltas. Además, su chasis es más corto y de metal para que puedas tener más libertad de movimiento y, al mismo tiempo, tenga capacidad de soportar golpes y girar mejor. Sus ruedas son de tamaños diferentes, siendo las centrales las más grandes para tener más movilidad.
- Patines de velocidad: son los más ligeros, aunque para poder usarlos se necesita un mayor control y nivel técnico. Son muy buenos para tomar impulso y para competición, pero no tanto para practicar saltos. Están compuestos por botas de cuero y fibra de carbono. Su caña es más baja y las guías de las ruedas son más grandes y largas de lo normal para conseguir más impulso con cada zancada. Estos son patines más estables que los anteriores, pero si eres iniciado te será mucho más difícil de manejar.
- Patines de agresivo, se usan para saltar, para rampas, derrapes, acrobacias y para hockey. Tienen la caña más alta de todas y las botas son más robustas. Por dentro están acolchadas y son muy rígidas. Están fabricadas con pasta dura y su chasis es de composite para proporcionar una mayor resistencia ante los impactos. Por otra parte, las ruedas son más pequeñas, gruesas (lo cual hace que el centro de gravedad baje para mayor estabilidad en los giros) y de diferentes tamaños con espacio entre ellas.